TRABAJOS FORZADOS EN EGIPTO

El faraón Seti I y su sucesor, Ramses II, emprendieron grandes programas de construcción durante sus reinados en los siglos XIV y XIII a. de C. Ramsés construyó ciudades enteras, entre ellas una nueva capital, monumentos, palacios, templos y estatuas. Fue necesaria una gran cantidad de trabajadores, tanto para edificar como para fabricar ladrillos y otros materiales para las construcciones. Según Diodorus Siculus, un historiador grecorromano del siglo I a. de C., Ramsés reclutó trabajadores extranjeros en vez de egipcios para sus ambiciosos proyectos. Los hebreos se contaban entre los peones contratados. No eran esclavos, ya que no se consideraban propiedad de los poderosos señores egipcios y, en teoria, eran libres. Cuando Ramsés reforzó las defensas de la costa mediterránea, planteó reconstruir las ciudades de Pitom y Raamses para que sirvieran de bases de suministro. Entonces reclutó mano de obra forzada, dentro de la cual quedaron los israelis que vivian en Gosen, en el delta del Nilo. Los trabajadores hebreos no laboraban en forma individual, sino que lo hacian para el Estado, pero vivian con sus familias. A las mujeres hebreas no las empleaban en trabajos forzados. Sin embargo, los obreros hebreos laboraban bajo condiciones brutales e infrahumanas, muchas veces peores que las de los propios esclavos. Estaban organizados en cuadrillas de trabajo bajo la supervisión de capataces egipcios. Carecian de derechos civiles y se les daba lo necesario para vivir. El trabajo era agotador. Pasaban muchas horas bajo el sol moldeando ladrillos después de mezclar arena, agua, lodo y paja. Tenian un sistema de zanjas, diques y canales que era vital para la sobrevivencia de Egipto ya que sin riego el área del Nilo dejaria de producir. Algunas veces se les asignaban trabajos en los campos. Debido a que el faraón era amo y señor de toda la tierra y controlaba las instituciones egipcias, los trabajadores eran considerados como servidores del rey. Sin embargo, habia categorias además de las de trabajadores forzados. En el nivel más bajo de la escala social estaban los esclavos comunes. La mayoria de ellos eran extranjeros, prisioneros de guerra o siervos vendidos al pais por traficantes de esclavos. Eran propiedad de individuos o bien del Estado, y eran comprados y vendidos como mercancia. A menudo los marcaban, como al ganado. No obstante, se les trataba bien, aunque sólo fuera para mantener su valor. Recibian comida, alojamiento, y una ración anual de ropa, lino y aceites. Habia también una clase de campesinos egipcios, en teoria hombres y mujeres libres, podian comprar propiedades, pero su situación no era mejor que la de los esclavos. Ellos trabajaban para el gobierno o para los templos y, como paga, se les daba una pequeña parte de lo que producian.