¿ CÓMO RESPONDIÓ MOISÉS AL TEMOR Y LA OPOSICIÓN DE SU PUEBLO ?

Los israelis tuvieron que padecer en el desierto la falta de alimento y agua, y lidiar con tribus hostiles, serpientes venenenosas, conflictos internos y muchos años sin hogar. Cuando su fe decaia, culpaban a Moisés y desafiaban su liderazgo. Después que el pueblo faltó a la alianza con su idolatria al becerro de oro, Moisés ordenó a los hijos de Levi que dieran muerte a los ofensores. El Éxodo dice que unos 3.000 hombres fueron muertos y que " Yavé castigó al pueblo " por su idolatria ( Éxodo 32:35 ). Al acercarse a Edom, el pueblo reprochó a Moisés el haberlos llevado a ese desierto. El Señor envió entonces serpientes de fuego que los mordian, y muchos murieron. Cuando se arrepintieron, el Señor se compadeció y dijo a Moisés: " Hazte una serpiente de bronce, ponla en un asta, y todos los mordidos que la miren sanarán " ( Números 21:8 ). En este relato, la serpiente fue un signo del poder curativo de Dios. Al llegar a las afueras de Canaán, Moisés envió a dirigentes de las 12 tribus a explorar esa tierra. Regresaron éstos con noticias de que de la tierra " mana leche y miel ", pero también con relatos de ciudades fortificadas y gigantes ( Números 13:27 ). Caleb y Josué instaron a los israelis a tener fe en el Señor, pero fue inútil. La gente empezó a vociferar contra Dios y Moisés. Como castigo por su falta de fe, todos los mayores de 20 años, excepto Caleb y Josué, murieron sin ver la Tierra Prometida.