EL INTACHABLE JOSÉ LLEGA AL PODER

Cuando el faraón nombró a José para gobernar " sobre todo el pais de Egipto " ( Génesis 41:41 ), fue la culminación de un asombroso ascenso al poder que empezó con una rivalidad fraterna. Celosos del favoritismo de su padre hacia José, los hermanos de éste lo secuestraron y lo vendieron a tratantes de esclavos ismaelitas, quienes lo llevaron a Egipto y lo vendieron a Putifar, capitán de la guardia del faraón. José resistió los requerimientos de amor de la esposa de Putifar, la cual, despechada, lo acusó de tratar de abusar de ella, y el ofendido esposo lo envió a la cárcel. El calabozo no pudo retener por mucho tiempo a José, que llegó a ser el hombre de confianza del jefe de la prisión, y también llamó la atención como intérprete de sueños. Su fama por este don llegó a oidos del faraón, a quien lo atormentaban sueños y visiones indescifrables. El faraón llamó a José y le relató uno de sus sueños: siete vacas gordas eran devoradas por siete vacas flacas; y luego siete espigas colmadas de grano eran consumidas por siete espigas raquiticas. José le comunicó que ese sueño significaba que Egipto tendria siete años de abundancia seguidos por otros siete de hambruna. Para prevenirse, José aconsejó que se almacenara una quinta parte de la cosecha durante la abundancia, como reserva. Asi lo hizo el faraón, y cuando atacó la hambruna, tal como José habia predicho, " de todos los paises venian a comprar trigo a José " ( Génesis 41:57 ). Entre los compradores estaban los diez hermanos de José. Su presencia dio a éste la oportunidad de hacerlos pagar por la crueldad con que lo habian tratado y de asegurar la supervivencia de su familia, a la que Dios habia elegido para su alianza.