LA DISPERSIÓN DE UN PUEBLO

Un judio que viajara a cualquier ciudad importante o pueblo pequeño del Imperio Romano podia ir confiado en que hallaria compatriotas que le dieran alojamiento, lo llevaran a la sinagoga del lugar y le ayudaran a encontrar alimentos que no violaran las leyes sobre la dieta judia. A principios del siglo I d. de C. el geógrafo griego Estrabón escribió sobre los judios: " Este pueblo ha formado comunidades en todas las ciudades y es dificil hallar un lugar del mundo habitado que no haya recibido miembros de esa nación ". En esa época, el 60 o 70% de todos los judios vivian fuera de Palestina, y las principales comunidades judias de Babilonia, Egipto y Asia Menor han existido durante varios siglos. La Diáspora ( dispersión ) se inició a principios del siglo VI a. de C., con el exilio babilónico y la huida de muchos judios a Egipto; pero durante el régimen helenistico desde fines del siglo IV a. de C. en adelante, el comercio y los botines de guerra causaron que muchos judios emigraran a España. Para el siglo I a. de C., la más numerosa y ejemplar comunidad de la Diáspora estaba en la ciudad egipcia de Alejandria. Llegaron judios de todos los estratos sociales y trabajaban en todas las áreas de la artesania y el comercio; y habia algunas familias muy ricas. Por ejemplo, Alejandro Lisimaco fue un importante administrador financiero en Egipto, tan rico como para recubrir con oro y plata las puertas del Templo de Jerusalén; su hermano, el filósofo Filón, fue prolifico escritor y el contribuyente más brillante de una larga tradición en la literatura judia de Alejandria, entonces un gran centro cultural. Los judios de Alejandria formaban una pacifica comunidad con su propio gobierno, pero no tenian la completa ciudadania alejandrina. En el siglo I d. de C., cuando pugnaron por obtener los derechos de ciudadania ( sin aceptar el culto a los dioses paganos de la ciudad ), estallaron violentos disturbios antijudios. Murieron muchos judios y sus sinagogas fueron destruidas. En otras partes del Mediterráneo los judios eran aceptados con su propia cultura y religión, pero no dejaban de ser extranjeros en sociedades paganas. Los conflictos politicos o económicos podian precipitar persecuciones y expulsiones. Cada comunidad judia establecia su propia forma de mantener la paz y la concordia con la cultura circundante.